El día 10 de Octubre se celebró el Día Internacional de la Salud Mental. Según la OMS, 350 millones de personas sufren depresión en el mundo y una de cada cuatro personas sufrirá una enfermedad mental a lo largo de su vida.
La enfermedad mental ha generado miedo y rechazo en la sociedad. La falta de información, sobre sus causas y su desarrollo, ayuda a que se mantenga la estigmatización que sufren estas personas y sus familias.
En muchos casos los medios de comunicación no desempeñan un papel positivo en la deseada normalización de la enfermedad mental, necesaria para generar una actitud tolerante con el problema que sufren los que padecen este tipo de enfermedad. Se presta mayor atención a los acontecimientos negativos en los que se ven envueltos y no da una imagen diferenciada entre la psicosis y la psicopatía, confundiéndose ambos términos, y dando una imagen de criminalidad de la psicosis que no concuerda con la realidad y produce una gran discriminización.
La sociedad necesita más y mejor información para comprender que las personas que padecen una enfermedad mental no suponen un peligro para la sociedad y así valorar su forma diferente de ver la realidad. Tratarles como personas y fomentar su autonomía va a permitir fortalecer su autoestima y que puedan disfrutar de la experiencia que supone ser humano.
Jesús Mendieta Martínez
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